domingo, mayo 28, 2006

sólo para tomar impulso..

"Mañana va a ser un gran día te lo digo yo,
si todo lo que te lastima el tiempo lo hace durar
hasta que seas consciente que no te hace daño,
si yo no se lo digo a nadie, pero me di cuenta
que pudo ser peor, que no fue para tanto..
ya no hay dolor,
ya no duele y no va a doler..
y vos preguntarás por qué esperamos tanto
sólo para tomar impulso y llegar más alto.."


No hay dolor
NO TE VA A GUSTAR

domingo, mayo 21, 2006

por qué..?

"Ten el valor de pegarte el tortazo y seguir adelante.. haz que se pregunten por qué sigues sonriendo.."

(Elizabethtown)

lunes, mayo 15, 2006

Intenta atrapar a un duende..



Había un lugar donde las personas buscaban la felicidad, para alcanzarla, les dijo un sabio, solo tenéis que atrapar un duende. Los que lo lograron, se sintieron felices. Pero lo más curioso fue que los que no lo consiguieron también se sintieron felices..

Haz la prueba, intenta atrapar un duende..

Paseando por Madrid..

domingo, mayo 07, 2006

Ana Karenina..



Reseña


La familia Karenina es un matrimonio modelo que goza del respeto y la admiración de la alta sociedad rusa. Ana reparte su tiempo entre el cuidado de su hijo y su vida social, siendo el centro de atención por su belleza impactante y su gran elegancia. Su vida se troncará cuando conozca al conde Wronsky, sintiendo por primera vez la fuerza del amor.

La pasión que experimentan los enamorados pronto será descubierta, provocando un enfrentamiento del matrimonio que traerá penosas consecuencias. Repudiada su relación por la sociedad, los amantes se marcharán fuera de San Petersburgo, cambiando para siempre sus vidas.

En contraste con esta unión, aparece la bella historia de amor entre Levine y Kitty, dos jóvenes que a través del tiempo comenzarán una vida en común, contando con el respeto y la admiración de quienes les rodean.


Crítica


León Tolstoi nos regala una obra imperecedera en el tiempo un libro fascinador e imprescindible por su grandeza y su fuerza.

De forma magistral describe las emociones y sentimientos de los personajes, produciendo al lector diferentes reacciones pero nunca la indiferencia. Absorto en sus líneas, el lector sentirá de forma paradójica infinidad de impresiones contradictorias hacia el mismo personaje.

Resulta asombroso cómo el autor crea el boceto de cada personaje, cuidándolo a través de cada una de sus páginas, ofreciendo al final un cuadro perfecto de cada uno de ellos, con sus miedos, sus penas, sus anhelos. Todos los personajes desde ese boceto inicial hasta el cuadro final van evolucionando, y el lector acompaña al autor en la dulce travesía.

Reducir este gran libro a la pasión de Ana Karenina, de la que toma el nombre, es un tremendo error. Esta obra va más allá: innumerables pasiones e historias se cruzan escritas con garra para transmitirnos esas vivencias como si fueran reales; enseñándonos un gran mundo con complejas situaciones de la nobleza rusa del siglo XIX.

Sin ser una obra autobiográfica, Tolstoi se identifica muy de cerca con el personaje de Levine: a través de sus experiencias y carácter nos describe vivencias propias; tanto sus más profundas inquietudes, como las transformaciones que sufrieron sus convicciones religiosas e ideales.

Con un arrebatador final, Tolstoi nos transmitirá un abanico de sensaciones, obligándonos a mantener la mirada perdida tras pasar la última página y darnos cuenta de que no seguiremos viviendo las vidas de estos personajes que, habiendo pasado a formar parte de nosotros mismos, con sus alegrías y sufrimientos, nunca podremos olvidar.

ssava



es muss sein!..

“Volvió a tener ante sus ojos la imagen de Teresa cogiendo la corneja en su regazo. Recordó que ayer la había molestado un social en el bar. Le vuelven a temblar las manos. Ha envejecido. Ella es lo único que le importa. Ella, nacida de seis casualidades, ella, que floreció del lumbago del médico jefe, ella, que está al otro lado de todos los «es muss sein!», ella es lo único que le importa.

¿Por qué sigue pensando si debe firmar o no? No existe más que un solo criterio para todas sus decisiones: no debe hacer nada que pueda perjudicarla. Tomás no puede salvar a los presos políticos, pero puede hacer feliz a Teresa. No sabe hacer ni eso. Pero si firma la petición, lo más seguro es que los sociales irán a visitarla aún con mayor frecuencia y que las manos le temblarán aún más. Dijo:

- Es mucho más importante desenterrar a una corneja que mandarle una petición al presidente.”



La insoportable levedad del ser
MILAN KUNDERA